El Miércoles Digital Concepción del Uruguay – Entre Ríos
Silenciosamente el viernes, el intendente José Lauritto firmó la rescisión del negociado denominado “Proyecto Turístico Integral”. En momentos en que los vecinos le exigen información al respecto, este martes por la mañana dio detalles sobre el acuerdo con Entretenimientos de la Costa. La empresa de Miguel Marizza se quedará sin la Terminal ni el Mercado y terminará -para el Municipio- el edificio en el tránsito pesado. A cambio, la provincia le condonará los aportes por explotar el juego por el valor de ese inmueble y de publicidad para la ciudad.
Por JORGE RUBÉN DÍAZ de EL MIÉRCOLES DIGITAL
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En una conferencia de prensa en su despacho, el jefe comunal explicó los alcances de la rescisión del “Proyecto Turístico Integral” entre la Municipalidad local y Entretenimientos de la Costa: el edificio de la Terminal, su hotel Francisco Ramírez y el Mercado Municipal 3 de Febrero seguirán en poder del Estado municipal; la empresa terminaría de construir el edificio donde planeaba instalar la nueva Terminal, a la vera del Tránsito Pesado y la pasaría a manos del Municipio. El beneficio para Marizza y compañía sería que las inversiones realizadas hasta el momento en Concepción del Uruguay la recuperarían del porcentaje de dinero que deben aportar al Estado entrerriano (según lo estable la Ley de Turismo, en concepto de la explotación de salas de juegos de azar en todo el territorio provincial), negocio al que apuntaban. Este arreglo está supeditado a la aprobación del Concejo Deliberante, lo que es un hecho pensando en la mayoría automática del justicialismo en el recinto y la mala publicidad que le generaría a un opositor rechazar este convenio.
Lauritto insistió en el concepto de la falta de consenso social del proyecto. Destacó que tuvo que buscar todas las posibilidades legales y económicas para salir del atolladero que recibió de las gestiones anteriores, donde incluso algunos funcionarios presentes en la rueda de prensa fueron piezas fundamentales en el avance del negociado que –más que evidentemente- era contrario a los intereses de la ciudad. El ex vicegobernador, con poca sutileza, les dedicó una oración que los hizo agachar la cabeza: “A los de Entretenimiento de la Costa no los conozco. Los conocí ahora. Yo no soy el que firmé, no soy el del llamado a licitación pública, no soy el que concedí”.
El acuerdo de rescisión contractual se firmó el 12 de agosto de 2016, dando por finalizado el contrato del 9 de noviembre de 2009 (durante la primera gestión de Marcelo Bisogni) entre la Municipalidad y la empresa Entretenimiento de la Costa, y sus modificaciones en el 2013 (cuando el actual ministro de la Producción de la provincia, Carlos Schepens, era el intendente). En la oficina del presidente municipal se encontraban Luis Osvaldo Carrozzo, coordinador General y de Jefatura y el secretario de Gobierno, Ricardo Leonel Vales, quienes –cada uno en su momento- fueron parte esencial en la ‘rosca’ defendiendo los intereses de Marizza. También estuvieron el viceintendente, Martín Oliva; y los concejales Sergio Vereda, Guillermo González, Marianela Marclay y Juan Martín Garay. No hubo nadie del área económica.
“Hicimos numerosas reuniones de tratativas para destrabarlo. Planteamos rescindir el contrato de concesión, lo cual en la práctica supone la devolución a la Municipalidad de la actual Terminal de Ómnibus Francisco Ramírez y el hotel; además del ex Mercado Municipal 3 de Febrero; y para la empresa significa extinguir de obligaciones de las inversiones que debían realizar allí. Y el cuarto tema era el mantenimiento de la actual estructura de las salas de juegos, que no están habilitados para operar en el Mercado o en otra parte de la ciudad”, explicó Lauritto.
“Le pedimos a la empresa que ceda el lugar donde está construyendo la nueva terminal de ómnibus, consistente en un predio de 30 mil metros cuadrados; y además el mantenimiento del plan de marketing que había llevado adelante la empresa en el contrato de concesión, que era el acompañamiento en materia publicitaria para la ciudad. La empresa propuso la devolución gratuita del predio con lo construido, finalizar la obra, y mantener el plan de marketing, siempre y cuando el Ministerio de Turismo (provincial) considere que el plan de obras efectuadas parcialmente hasta acá se encuentra dentro de las obligaciones que tienen quienes explotan salas de juego y entretenimientos en la Provincia. Esto nos llevó a hablar con funcionarios provinciales para ver si las inversiones están consideradas dentro del marco de la Ley de Turismo Nº 4996”, continuó el primer mandatario.
El presidente municipal salió así a dar información sobre la rescisión del contrato que firmó tan subrepticiamente como lo fue el principio de esta lucha entre un grupo de vecinos que buscaban impedir el negociado, por un lado, contra la ‘empresa’ y los funcionarios municipales que dirigieron los destinos de la ciudad durante los últimos siete años como socios para intentar hacerlo posible, por el otro. Precisamente, esos vecinos –mediante carta documento-, le reclamaban a Lauritto detalles sobre las secretas negociaciones
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