El Miércoles Digital Concepción del Uruguay – Entre Ríos
Bajo la consigna “Salvemos el Paraná”, se realizó este 8 de diciembre el recorrido náutico entre Victoria y Rosario en protesta contra el proceso licitatorio de la llamada Hidrovía. La convocatoria fue realizada por el arco de organizaciones sociales, ambientales y políticas que en abril pasado impulsaron la épica travesía “Remar Contracorriente, por el Agua, la Vida y la Soberanía”.
En esta oportunidad, “hermanando” las ciudades del sur de Entre Ríos y Santa Fe, expresaron nuevamente el rechazo al dragado a 44 pies que va de la mano con la concesión a un privado de la red troncal del río Paraná. Esta profundidad es “romper el río” para hacer “una zanja”, para “encajonarlo, acelerar el curso del agua” y afectar a toda la flora y fauna del humedal, graficó a ERA Verde el referente del Foro por la Recuperación del Paraná, Luciano Orellano. Al activista social anticipó que por delante quedan tres meses claves para fortalecer la lucha antes de la entrega de la gestión del río a privados extranjeros.
Una amplia y entusiasta convocatoria se reunió para navegar, de orilla a orilla del río Paraná y unir Victoria, Entre Ríos, con Rosario, Santa Fe. Los participantes fueron invitados a sumarse a una manifestación en rechazo a la concesión de la Hidrovía que ingreso en un proceso de licitación y adjudicación, a pesar de las críticas a los términos del mismo. En esta oportunidad, se sumaron representantes de organizaciones ambientalistas, comunidades ribereñas, técnicos hidrográficos, abogados especializados, miembros de la Iglesia, organizaciones sociales, sectores políticos, sindicales, estudiantiles, científicos y académicos, como público en general, que confluyeron en la jornada con la firme consigna: “El río no se vende, se defiende”, fue la arenga que se repitió a lo largo del a jornada que comenzó a horas tempranas de este lunes 8 de diciembre y finalizó sobre el ocaso.
El punto de inicio fue en el “club de pescadores” de Victoria. Allí los protagonistas de la travesía abordaron sus embarcaciones en las que flameaban “banderas argentinas” y eran alentados por quienes se reunieron a despedirlos con consignas en defensa de la Patria y la soberanía. Desde allí partió la llamativa caravana rumbo a la “Isla de Los Mástiles”, frente a la localidad de Granadero Baigorria, provincia de Santa Fe, donde arribaron en horas del mediodía. En el lugar se sumaron más embarcaciones y kayakistas para engrosar notablemente el desfile en “defensa de la soberanía argentina sobre el río Paraná”, donde se apuntó a “visibilizar el reclamo y vivenciar al río como patrimonio de todos”.
Pasado el mediodía, una amplia concurrencia se dio cita en la ciudad de Rosario a orillas del río Paraná, sobre la Rambla Catalunya, donde se aguardaba que arribara la caravana. En la plata se realizó una “radio abierta” donde tuvieron voces referentes de las organizaciones. Alrededor de las 17:00 llevaron las embarcaciones que fueron recibidas en un clima entusiasta y festivo, con grandes pabellones argentinos flameando sobre la costa entre aplausos y vítores en un emotivo “banderazo”. Se entonaron a viva voz las estrofas del Himno Nacional, para luego dar lugar a un “acto” en el que tomaron la palabra; Javier Núñez (Asesor Islas Victoria), Horacio Enríquez (Ecourbano), Luis Cosita Romero (Remar Contracorriente), Marina Ortiz (JCR), Julián Ferrero (concejal Ciudad Futura), Sebastián Martínez Ledesma (Multisectorial Humedales), Martha Arriola (Cuidadores Casa Común) y Luciano Orellano del Foro por la recuperación del Paraná. El cierre de la jornada coronó en un “festival cultural”, compartiendo el canto, la música y el baile.
INTERESES PROFUNDOS
En diálogo con ERA Verde, Orellano planteó de forma contundente que el tiempo corre y resta tres meses para frenar el un proceso licitatorio que tiene por objetivo reprivatizar el río Paraná para que “quede a manos privadas extranjeras”, afirmó. “Pero, además, esto tienen la locura de llevar el río a (una profundidad de) 44 pies. Tenemos el río en 36 pies, 34 más 2 de quilla que necesitan todos los barcos. Salió el pliego licitatorio que plantea una primera etapa de 40 pies, que son 12 metros, y llevarlo a 14 metros en una segunda etapa, sin estudio de impacto ambiental. Esto es hacer una zanja del río Paraná, encajonarlo, acelerar el curso del agua y es un ecocidio para la flora y la fauna. Ni hablar el sistema de humedales, este oasis, este privilegio que tenemos los argentinos que es el Delta. Además, esto es contraproducente desde el punto de vista económico. Porque en el año 1995, cuando estaba a 28 pies, el argentino pagaba por el servicio de dragado y balizamiento del canal troncal, menos de 1 dólar. Ahora está pagando 4,20 dólares por toneladas. Esto es un proyecto de bajar 2,5 metros el río, es romper la profundidad del río, en 130 metros de ancho por 600 kilómetros. El daño es colosal. Es lo mismo que hicieron en parte del río Misisipi y colapsaron los pantanos del Misisipi”, comentó sobre hechos similares con consecuencias sabidas.
Orellano también señaló a ERA Verde que “detrás de esto hay un negocio de las exportadoras, de las empresas de dragado, pero también inmobiliario de un territorio que son los humedales, que son 17 millones de kilómetro cuadrados. Acá hay 250.000 cabezas de ganado, hay 131.000 hectáreas de tierras fiscales, con las mejores pasturas para hacienda de exportación. Así que lo intereses que están en juego y que le dan la espalda a la flora, la fauna y el río Paraná. Por eso el río nos necesita, por eso hacemos esta travesía de Victoria a Rosario, la sociedad nos respalda con tanta gente de la comunidad, la cultura, los pescadores, los isleros, los que realizan actividades deportivas y todos los que aman el río. En tres meses se resuelve la licitación, así que si querés este río, no hay que darle la espalda. Este río es una de las cosas más maravillosas que tiene la naturaleza”, alentó.
Planteado otra faceta del conflicto, la referente del Movimiento Cuidadores de la Casa Común, Martha Arriola, trazó el escenario a quienes se convocaron en la playa tras el arribo de las embarcaciones. En el micrófono abierto a las organizaciones Arriola apuntó que situación es compleja y difícil, pero que “el pueblo organizado en la calle, en el río, es quien va a ganar esta lucha. Y algo más: estamos también litigando, porque la licitación se viene y tenemos que insistir desde la Justicia”, adelanto. ”Ese es el paso próximo y, además, seguir organizando la articulación de nuestras luchas”, insistió. “No quedarnos con los brazos cruzados y tener la esperanza en alto; es un poco lo que el Papa Francisco no dejó como legado. Nuestro movimiento nace por eso, el ‘cuidar la casa común’. Y construir lo que él llamaba el multilateralismo desde abajo. Eso es lo que estamos haciendo y vamos triunfar. Porque el río no se vende, el río se defiende”, cerró.
ARGUMENTOS
Desde la organización se subrayó el “rotundo rechazo al proyecto de dragado a 44 pies del río Paraná, así como su reprivatización y entrega a manos extranjeras”. En este orden, se expresó que la convocatoria puso de manifiesto un consenso creciente: “nuestra contundente oposición contra lo que sería un ‘crimen ambiental, un verdadero ecocidio’, agudizando aún más la crisis hídrica que ya viene afectando a toda nuestra zona, poniendo en serio riesgo el acceso del agua como recurso vital, como en el caso de la vecina ciudad de Victoria (Entre Ríos), y un gravísimo avance más en la declinación de nuestra soberanía”. Sostuvieron que “no es una modernización necesaria” sino una ofensiva para transformar al río en “autopista fluvial para buques de ultramar”, que “los barcos deben adaptarse a los ríos, y no al revés”, y que “actúan solo para beneficio de las grandes corporaciones agroexportadoras y extranjeras, que son quienes tienen además el control del comercio exterior de la Argentina”. Agregaron que “una mayor profundización del Paraná implicará graves riesgos ambientales: destrucción de humedales, deterioro de la biodiversidad, amenaza sobre pueblos originarios y comunidades ribereñas, y degradación de los cauces naturales”, Por último se advirtió que “el plan oficial carece de fundamentos básicos, no hay un estudio de impacto ambiental, no existe evaluación hidrológica de largo plazo, ni menos aún mecanismos de participación real de las comunidades”.
Fotos y video: Gentileza Eco Urbano / Foro por la Recuperación del Paraná
De la Redacción de ERA Verde
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