Para el centro-norte del país, la invasión de la “chicharrita” condenó un par de campañas y condujo a muchos productores a cambiar sus esquemas con tal de no sufrir mayores pérdidas. Eso fue lo que desencadenó que en áreas tradicionalmente maiceras empezaran a ganar terreno otros cultivos, sean tradicionales como la soja o más bien de nicho.
Afortunadamente, fruto de las condiciones climáticas, los últimos informes de la Red Nacional de Monitoreo de la chicharrita del maíz (Dalbulus maidis) confirman que esta plaga sigue en retirada y que, por el momento, los productores no tienen de qué preocuparse.
Eso explica por qué el diagnóstico que hace Manuel Villaga, que es titular de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos y secretario de Acsoja, es tan positivo respecto a la situación del maíz en su provincia.
Más del 90% del área registrada en el Litoral durante el último relevamiento no dio señales de presencia de este insecto en las trampas cromáticas, lo que es una muy buena señal de cara a la campaña gruesa.
Y eso se expresa en los números, pues tras haber perdido más de un tercio de su superficie en detrimento de la soja, Villagra asegura que este año el maíz volverá en Entre Ríos a acercarse a sus valores tradicionales que rondaron siempre el medio millón de hectáreas.
Más allá de que, como explica el referente, “los márgenes son muy finitos”, el buen perfil de lluvias que hubo en agosto y septiembre suman también fichas a la retracción de la plaga. De acuerdo a las estimaciones que hizo la entidad que dirige, esta campaña se sembrará alrededor de 450.000 hectáreas.
Sin embargo, Villagra asegura que “hay que seguir tomando los recaudos para que, si climáticamente se dan las condiciones y la chicharrita regresa, estar preparados y que no haga estragos como los hizo en la provincia”.
Esa es, de hecho, la advertencia que arroja cada uno de los informes periódicos de la red de monitoreo, que llama a mantenerse alertas ante un eventual recupero de la plaga.
Cuando Bichos de Campo dialogó con el representante entrerriano, en el marco del Seminario Acsoja celebrado en la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), apenas había entrado en vigencia la eliminación temporal de retenciones, que horas más tarde, con un estrepitoso final, demostró ser una medida con fines recaudatorios que pudieron aprovechar casi exclusivamente las grandes exportadoras.
Por eso es que Villagra no tuvo la oportunidad de hacer una evaluación del saldo que dejó esa medida, pero aún así señaló que, siempre que se trate de una medida permanente -o, al menos, sostenida por mucho tiempo-, la eliminación de retenciones deriva en “más producción, más inversión, más agregado valor y más arraigo”.
El problema, observó el titular de la bolsa entrerriana, es si luego están dadas las condiciones para que eso efectivamente ocurra.
“Si el día de mañana se eliminan definitivamente las retenciones, hay más inversión por parte de los productores y hay más agregado de valor, ¿estamos en condiciones a nivel infraestructura para soportar toda esa producción?”, se preguntó Villagra, que considera que aún resta invertir mucho en ese sector para que el productor pueda efectivamente capturar valor y colocar sus granos sin problemas.
Fuente:Bichos de Campo.
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