Introdujeron tecnología de pulverización aérea que permite trabajar en terrenos complejos y cultivos altos. Evita pérdidas por pisoteo y mejora la precisión en tratamientos. La iniciativa ya opera desde febrero con gran aceptación entre los usuarios del servicio.
“Estamos incorporando los drones como una herramienta adicional para los productores. La gran ventaja de esta tecnología es que permite realizar aplicaciones en cultivos de gran altura o en terrenos donde las máquinas terrestres no pueden acceder, especialmente después de lluvias”, destacó el encargado de las pulverizadoras y del semillero multiplicador, Facundo Pighetti.
En ese marco, el ingeniero enumeró varias ventajas clave de utilizar drones en las aplicaciones agrícolas: “Se puede acceder a áreas difíciles, lo que permite una aplicación más precisa de fertilizantes y pesticidas. Además, al evitar el pisoteo de las plantas, se disminuyen las pérdidas en la producción. Se estima que el pisoteo puede causar una pérdida del tres por ciento en la producción, lo que se traduce en una pérdida económica considerable”.
Si bien la aplicación con drones puede ser más costosa que la terrestre, Pighetti argumentó que “se asemeja más a las tarifas de los servicios aéreos, ofreciendo una alternativa eficiente que justifica el costo”.
Desde su implementación a fines de febrero, el servicio ganó popularidad. La introducción de esta tecnología no solo beneficia a los productores individuales, sino que también contribuye al desarrollo del sector agrícola en la región. “Al ofrecer servicios avanzados, La Ganadera se posiciona como una cooperativa innovadora que apoya a sus asociados en la adopción de nuevas tecnologías”, comentó.
Futuro de la tecnología en la agricultura
La tendencia hacia la digitalización y la implementación de tecnologías avanzadas en la agricultura está en aumento. “Las cooperativas que adopten estas innovaciones no solo mejorarán su eficiencia operativa, sino que también estarán mejor preparadas para enfrentar desafíos futuros, como el cambio climático y la creciente demanda de producción agrícola”, concluyó.
Finalmente, invitó a los productores a considerar el uso de esta herramienta complementaria: “No se trata de reemplazar las pulverizadoras terrestres, sino de ofrecer una opción más que se adapte a las necesidades específicas de cada cultivo”.
Fuente: AIM Digital.
Esta nota es posible gracias al aporte de nuestros lectoresSumate a la comunidad El Miércoles mediante un aporte económico mensual para que podamos seguir haciendo periodismo libre, cooperativo, sin condicionantes y autogestivo. |