BNA
Inicio » Política » "Cuanto más lejos se está del poder, más irresponsables son los enunciados; cuanto más cerca, más sensatos se vuelven"
OPINIÓN

"Cuanto más lejos se está del poder, más irresponsables son los enunciados; cuanto más cerca, más sensatos se vuelven"

El funcionario municipal Juan Martín Garay se mete de lleno en este 2023 de campañas políticas. Trae a colocación el teorema de Baglini-que desarrolla en el texto- para explicar algunos de los comportamientos de los actores que intervienen en las contiendas electorales. 

 

Por JUAN MARTÍN GARAY (*)

Dijo Raúl Baglini que: "Cuanto más lejos se está del poder, más irresponsables son los enunciados políticos; cuanto más cerca, más sensatos y razonables se vuelven".

Empezó el año electoral y las aspiraciones se empiezan a dejar ver. El teorema de Baglini vuelve una y otra vez a ser puesto en práctica para el análisis de la realidad política de quienes aspiran a acceder al poder o a retenerlo según sea el caso.

El extinto dirigente del radicalismo de Mendoza, Raúl Baglini, popularizó una hipótesis que postula que las opiniones de mayor moderación crecen en la medida en que las personas que buscan ponerse a consideración de la ciudadanía se acercan al poder o sienten tener más posibilidades reales -o infundadas- de acceder al mismo. En síntesis, este postulado sirve para medir las chances reales de llegar al poder, visto desde la perspectiva de la expresiones públicas políticas.

 

¿Quién fue Raúl Baglini?

Reconocido político mendocino que ejerció los cargos de Diputado Nacional (entre 1983 y 1993) y Senador Nacional (entre 2001 y 2003). Llegó a ser presidente de la Convención Nacional de la Unión Cívica Radical. En 1987 perdió las elecciones para gobernador de Mendoza contra José Octavio Bordón. Tras dejar el Senado Nacional se retiró de la política y se dedicó a la actividad profesional ejerciendo como abogado en su estudio jurídico. Falleció en el 2021 a los 71 años.

Yendo de lo general a lo particular -en el contexto provincial y local- por parte de quienes aspiran a acceder al poder y no lo tienen se empieza a vislumbrar un esquema de “campaña negativa” que utiliza el principio del carbón: “si no quema, al menos tizna”.

El periodista mendocino Gabriel Conte opina -con visión política- que: “Raúl Baglini fue un exponente de una generación que pensaba en ideas e invitaba a pensar para cambiar el estado de cosas. Este Diputado no actuaba para la tribuna, ejercía. Con esto se quiere decir que no llegó a conocer, siendo legislador, la costumbre de hablar solo cuando se encendías las luces de la TV. Es más, muchos de sus principales exposiciones en el Congreso, en su primera etapa, como espada económica de Raúl Alfonsín, son inhallables en video. En una oportunidad expuso durante 7 horas corridas sin adjetivar ni vilipendiar a nadie: aportó datos, análisis, refutaciones y propuestas en torno a la deuda externa. Polémico, de lo contrario no estaría en política, agitó ideas contrafácticas dentro de lo posible en el sistema democrático. Pensó que las cosas podían hacerse de manera diferente. Lo pensó e invitó a pensar en esas posibilidades”.

El “Teorema de Baglini”

Este teorema formulado por el “animal político” de Baglini en el año 1986 analiza las conductas de las y los dirigentes a medida que se acercan al poder o pretenden acceder al mismo. Baglini contó oportunamente el porque de su motivación al expresar dicho postulado, su llano y sencillo lenguaje fue contundente: “Apelé a la ironía para mostrar las barbaridades que se decían durante la discusión parlamentaria del presupuesto de 1986, ahí fue que dije lo del teorema, que dice que las propuestas más extremas se transforman en racionales conforme uno se va acercando al poder. Es una observación de la realidad y se aplica en todos lados, es universal".

Mediante un trabajo de análisis e investigación llevado adelante desde la Universidad Nacional de San Martín, indican que este teorema se puede aplicar a cualquier tema relevante. De hecho se lo usa como "regla de oro matemática de la política", la clave de su éxito radica en el contexto en que fue formulado. Hay por lo menos cinco acepciones a su planteo: 1) Cuanto más lejos se está del poder, más irresponsables son los enunciados políticos; cuanto más cerca, más sensatos y razonables se vuelven. 2) A medida que un grupo se acerca al poder, va debilitando sus posiciones críticas al gobierno. 3) Las convicciones de los políticos son inversamente proporcionales a su cercanía al poder. 4) Cuanto más cerca del poder está, más conservador se vuelve un grupo político. 5) Cuanto más se acerca un político al poder más se aleja del cumplimiento de sus promesas de campaña.

Tiempo de campaña

En momentos de gran agitación como los que se comienzan a vivir, por el contexto electoral que indefectiblemente llegó para quedarse este año, las manifestaciones políticas deberán ser lo más ajustado posible a la honorabilidad intelectual. Algo que parece debe ser así, no siempre lo es.

Por eso el “Teorema de Baglini” bien sirve para dejar expuesto a más de un espacio político y sus representantes. Para algunos el camino para llegar al poder reside en la mentira o la confusión. Tanto una como otra no deberían tener margen en aquellas personas que desde su intelectualidad tienen el sano derecho a elegir y ser elegidas, pero también la obligación de decir la verdad con total honestidad.

Yendo de lo general a lo particular -en el contexto provincial y local- por parte de quienes aspiran a acceder al poder y no lo tienen se empieza a vislumbrar un esquema de “campaña negativa” que utiliza el principio del carbón: “si no quema, al menos tizna”.

Por más lejos que se esté de lo que realmente le importa por estas horas a la gente, en estos meses nos vamos a encontrar condicionados por este lamentable principio, algo que además se suma al cansancio social y torna un recurrente hartazgo.

Resulta preocupante que este tiempo de campaña se este estructurando, por parte de quienes quieren ser gobierno, solamente con la estrategia de proyectar cuestiones negativas de las circunstanciales personas adversarias, tratando de mostrarlas ante la opinión pública como la representación de personajes nocivos que amenazan y ponen en riesgo la reputación, credibilidad y la consolidación de las instituciones, así como la estabilidad de las finanzas públicas, la prosperidad y el futuro. Todo un combo al que se le suman las expresiones vacías -meramente aspiracionales- que se repiten a modo de slogan como resultante de los focus group o grupo de discusión.

Fines y medios

En estos momentos donde más nos necesitamos entre todos para salir adelante y solucionarle los verdaderos problemas a la gente, sería bueno tener la madurez suficiente para ejercer una sana manifestación de “la política” y no una banal expresión de ella. Hay quienes se deben la eterna y tardía tarea de reconsiderar la relación ética entre fines y medios, pero todos nos debemos una unidad de acción que permita revalorizar el concepto de política y ubicar de una vez por todas “al otro como la medida de todas las cosas”.

Pensemos que la acción política siempre debe constituir un poder que organiza la comunidad para orientar lo social en los términos que mejor satisfagan las aspiraciones generales. Hoy por hoy la esterilización de esa acción política por parte de cierta dirigencia se encuentra dada fundamentalmente por la afanosa búsqueda personal y sectorial de poder. Enfrentamos un tiempo complejo donde se requieren gestos de grandeza que privilegien la cultural del diálogo y el encuentro. Porque la crisis de representatividad está demostrando discusiones insanas y sin proyectos, sustentado en acciones de destrucción del otro como único recurso con descalificaciones que llegan hasta el hartazgo de los ciudadanos de a pie.

Si lo que queremos es pensar en grande, aspiremos entre todos a fortalecer los lazos solidarios y la construcción de un mismo destino histórico. Fortalezcamos las instituciones y consolidemos una vida democrática que arriba este año a sus primeros 40 años ininterrumpidos fundada en valores como la verdad, la vida, la justicia, la solidaridad, el amor y la paz. Partamos de la aceptación del otro, crezcamos en actitudes de respeto y recordemos la "regla de oro matemática de la política" que expresó Baglini: "cuanto más lejos se está del poder, más irresponsables son los enunciados políticos; cuanto más cerca, más sensatos y razonables se vuelven" (por más que se compartan o no).

 

(*) Secretario de Gobierno de la Municipalidad de Concepción del Uruguay desde el 2019. Presidente de Bloque Concejales del PJ 2017-2019. Presidente Comisión Hacienda y Presupuesto 2015-2019. Decano del Colegio Mayor Universitario de Santa Fe 2003-2004.-

 

Esta nota es posible gracias al aporte de nuestros lectores

Sumate a la comunidad El Miércoles mediante un aporte económico mensual para que podamos seguir haciendo periodismo libre, cooperativo, sin condicionantes y autogestivo.

Deja tu comentario

comentarios

Destacado

El debate por la universidad pública que sacude a la Argentina

El gobierno de Milei lanzó un plan de ajuste que significa un recorte presupuestario sin …